El cachorro debe comer tras el destete (21-25 días) un alimento de cachorro repartido en el mayor número posible de tomas diarias hasta llegar a una sola toma o dos cuando el animal alcanza los 10-12 meses.
Es importante tener muy presente que si nos decidimos por un alimento de alta calidad y, por tanto, de fácil digestión y asimilación de nutrientes, el animal consumirá menos cantidad que si tuviera que alimentarse con otro alimento de peor calidad, menos digestible y de más difícil asimilación de los nutrientes.
Lo que muchas veces nos parece caro es en realidad bastante más barato; a menudo por ahorrar un euro gastamos más en las consecuencias (lento crecimiento, menor desarrollo, menor resistencia a infecciones…).
Como regla nemotécnica, recordemos que los adultos precisan los siguientes gramos de un pienso para perros (alimento seco estándar 3.700-4.000 kcal. ME/kg.), según tamaño de las razas
Razas muy pequeñas |
28 g./kg. |
Razas pequeñas |
24 g./kg. |
Razas medianas |
20 g./kg. |
Razas grandes |
17 g./kg. |
Razas gigantes |
15 g./kg. |

El nutriente más importante en la dieta
Una dieta correcta es la condición principal para que nuestras mascotas disfruten de la mejor salud; pero para alimentar correctamente a un animal de compañía deberíamos recordar los posibles nutrientes que componen su dieta y que son agua, carbohidratos o hidratos de carbono, proteínas, grasas, minerales y vitaminas.
Todos estos nutrientes son necesarios para el correcto estado de nuestra mascota, dado que tienen unas importantes y “vitales” funciones: forman parte de los “materiales de construcción” que el organismo de la mascota utiliza para “montar” su estructura; intervienen en las reacciones químicas que se producen en el organismo del animal; transportan sustancias de todo tipo dentro, a través y fuera del organismo; tienen una importante función en la regulación de la temperatura corporal; hacen que los alimentos sean más o menos apetecibles para el consumo, y proporcionan energía. El agua intervendrá directamente en la práctica totalidad de estas funciones, con la excepción de la última: el agua no proporciona energía en su sentido estricto, aunque nos parezca el mejor “combustible” cuando el calor aprieta.