Perro de Agua Español
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:19h
Pocas razas han demostrado una versatilidad tan útil y provechosa para el ser humano como nuestro Perro de Agua. Su nombre describe la función esencial que le ha llevado a acompañar a marineros desde sus orígenes, pero su inteligencia y su capacidad de aprender y dedicarse a sus labores no pasó desapercibida a los pastores que buscaban un perro valiente y enérgico para que acompañase a su ganado. Pescador, pastor, cazador, oficios todos ellos con un gran arraigo en el costumbrismo ibérico, pero no queda ahí el poder de convicción de esta gran raza.
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Origen e historia
Se le podía haber llamado perro de pastor ibérico, ya que lleva más de 1.000 años dedicado a labores de carea con ganado lanar, caprino y otros; pero su versatilidad para desempeñar cualquier tipo de trabajo hacen de él un perro polivalente que se siente como pez en el agua. Hoy es el perro de rescate de los bomberos andaluces, el perro antidroga de la Guardia Civil, el recogedor de patos en la marisma, el perro terapeuta con ancianos en residencias y hospitales y de niños con necesidades educativas especiales. Siempre con ganas de jugar, valiente, muy inteligente y, cómo no, bellísimos con sus lanas ensortijadas. Aún se le puede ver entre los barcos en los viejos puertos pesqueros del norte de España queriendo ayudar a los marineros en lo que fuese menester y, cómo no, acompañando al pastor, al cabrero, en las sierras andaluzas.
Gracias a su funcionalidad, vitalidad y el apego a sus amos se ha conservado como una raza pura, sobreviviendo a varias civilizaciones de colonizadores de España. Hoy disfruta de una popularidad asombrosa debido a ese carácter juguetón, de eterno joven dispuesto a alegrar a sus seres queridos. Se le ha denominado con muchos localismos, pero su nombre lo dice todo: Perro de Agua Español.
El Perro de Agua Español es una de las razas con más participación en las 40 exposiciones caninas, nacionales e internacionales que se celebran por todo el territorio nacional cada año.
UN PERRO DEL SUR
El Perro de Agua Español es una raza antiquísima originaria del sur de la Península Ibérica, se conserva un escrito del año 1100 en La Sociedad Canina de Portugal de cuando el Algarbe portugués y Andalucía eran una misma tierra que recoje referencias de un perro de lanas muy trabajador que lo mismo pastoreaba que cazaba. De este perro sur-ibérico hoy tenemos dos versiones: el Perro de Agua Portugués y el Perro de Agua Español, el primero, varios centímetros más grande que el Español, con pelaje algo menos lanoso y rizado que el nuestro, pero con una conformación anatómica muy parecida.
Desde que empezamos con la recuperación de la raza en los años 70, no hemos encontrado escritos fidedignos que nos hablen de un Perro de Agua Español como el nuestro, sí del perro de agua francés o Caniche, al que entroncan con el “Barbet”.
Desgraciadamente para la raza, como bien dijo nuestro primer presidente y fundador de la AEPAE, don Santiago Montesinos Rubio, el Perro de Agua Español “existía, pero nadie lo conocía”; estuvo entre nosotros durante más de 1.000 años y nadie se preocupó de darlo a conocer, de hacerle un estándar, un prototipo racial, de definirlo. Ni siquiera cuando más se le valoró, porque hasta llegó a tener comida y sueldo junto a su amo pastor de la privilegiada Mesta, que lo utilizó para manejar el ganado de sur a norte en busca de frescos pastos en los agostaderos, siempre arropados, cómo no, por los vigilantes y feroces compañeros de cañadas y veredas, los Mastines Españoles.
Han sido varios articulistas, oportunistas de última hora, los que han intentado atribuirle diferentes orígenes a la raza. Nada más lejano de la realidad, ya que no hay otra historia que la que se cae por su peso: perro ibérico, antiguo, tronco de todas las razas de perros de agua que existen en el mundo, incluidos el Caniche francés (como bien reconoció la presidenta de este club a principios de los años 80 y como pudimos comprobar después con los señores franceses del Barbet cuando vinieron a Andalucía a importar Perros de Agua, de los más grandes, del sur, para recuperar su raza y, más recientemente, los italianos, buscando Perros de Agua, también del sur; pero en este caso de los más pequeños, para refundar su “lagotto romanolo”.
EN LA ACTUALIDAD
Hoy la raza está difundida por Europa (además de por toda España con unos 15.000 ejemplares), siendo Finlandia, con unos 400 perros, e Inglaterra, con unos 300, los países que cuentan con más ejemplares en la actualidad. En América del Norte existe un club de la raza afiliado a la AEPAE (lo mismo que el resto de clubes extranjeros existentes en Europa). Hay perros en centro América y últimamente han llegado a Australia.
CARACTERIZACIÓN DE LA RAZA
El Perro de Agua, de gran inteligencia, está dotado de una excelente salud y es capaz de aprender de forma natural las condiciones de su trabajo. Una raza de una rusticidad y capacidad de adaptación enormes, ya que se amolda con mucha facilidad tanto a los climas fríos y húmedos del norte, como a los calurosos del sur de la península.
Actualmente, existe una población numerosa y homogénea de Perros de Agua en un estado de pureza racial asombroso. Este hecho lo explica el control estricto de cruces de igual a igual entre individuos de la misma raza, con tendencia espontánea a perpetuar de generación en generación el tipo.
Es un perro que en el sur desarrolla tareas de pastoreo o carea con gran eficacia, resultando un valioso ayudante para el hombre, su actividad principal desde hace muchos años. Es por ello que ha sido y es la imagen consustancial de los campos donde pastan el cabrío y bovino de Andalucía y de zonas de Extremadura.
El Perro de Agua Español es un excelente nadador y posee una asombrosa capacidad de buceo, pudiendo alcanzar hasta varios metros de profundidad.
En su utilización como auxiliar en la caza da muestras de una boca adecuada, pero dura; de un pero que se acostumbra fácilmente al contacto con la pluma o incluso con el pelo. Se presenta como un buen levantador de piezas de pelo (conejo), introduciéndose con decisión entre matorrales en su busca y respondiendo bien a la llamada de parada del conductor. Posee un excelente olfato, aunque tal vez sea su función de retriever en la que más futuro tiene, al hacer gala de unas magníficas cualidades como perro cobrador.